Existen tres tipos principales de colchones actualmente en el mercado. Veamos sus características, pros y contras
Colchón de muelles
Son los que la mayoría de la gente conoce, ya que están presentes en el mercado, nada menos que desde el siglo XIX.
Un colchón de muelles completo consta de la base somier, los muelles y las capas de relleno. En cada tipo. Hay varios tipos diferentes de sistemas de muelles, desde los muelles Bonnell a muelles ensacados independientes. Los muelles de mejor calidad son los de calibre 14. A mayor número de muelles mejor se puede apoyar la persona que duerme. En la parte superior de los muelles, los fabricantes utilizan relleno para proporcionar una superficie cómoda para dormir. El relleno puede ser de espuma de poliuretano, viscoelástica o látex, y pueden ser de varios centímetros de espesor.
 |
| Muelle Bonnell |
 |
| Muelles ensacados |
Algunos modelos reciben el mayor número de quejas por su poca comodidad o longevidad. Los muelles pierden capacidad de sostén más rápidamente que otros sistemas. Así, los colchones de muelles deben ser cambiados en un promedio de cada 5-7 años. La transferencia de movimiento es otro inconveniente, ya que el diseño no permite separar los movimientos de un lado de la cama de los del otro, por lo que un compañero de cama puede llegar a molestar a la otra persona. Con las grandes marcas de la industria, el precio puede no siempre coincidir con el valor.
Colchones de viscoelástica
Los colchones de viscoelástica se introdujeron por primera vez en la década de 1990 bajo la marca Tempur-Pedic. Científicos de la NASA inventaron el concepto original de espuma viscoelástica, como un material de amortiguación para absorber los efectos de las fuerzas de la gravedad durante el despegue de las naves espaciales. La viscoelástica es un material único que se amolda a la forma del cuerpo y distribuye el peso aplicado de manera uniforme sobre su superficie para eliminar los puntos de presión causados por las zonas más pesadas como las caderas y los hombros.
Estos tipos de colchones utilizan construcciones bastante simples que poco difieren entre los fabricantes. La parte de viscoelástica del colchón es la capa superior, que puede tener de 5 a 20 cm de espesor. Esta capa se apoya en una espuma de base, que suele ser más densa y no tiene propiedades de memoria (de lo contrario el cuerpo se hundiría hasta el fondo).Puede haber múltiples capas de espuma con propiedades diferentes, y algunos fabricantes diseñan canales de aire entre las capas para reducir el calor. Una colchón con un núcleo de muelles no sería considerado un colchón de viscoelástica verdadera.
Las principales diferencias que se encontrará al comparar colchones de viscoelástica serán la densidad de la espuma y su tipo. La densidad óptima oscila entre 6,0 a 8 Kgrm/metro cuadrado. Una densidad más baja es susceptible de ruptura y ofrece un soporte de calidad inferior, mientras que una densidad algo más alta puede ser viscosa para la mayoría de la gente.
El precio de un colchón de viscoelástica se relaciona a menudo de manera significativa con su densidad. Cuanto más densa es la viscoelástica, más caro es el colchón. Las marcas más caras tenderán a utilizar viscoelástica de alta densidad y las marcas de menor precio tenderán a utilizar sobre todo la densidad más baja.
A mayor densidad de la viscoelástica, mejor es la durabilidad / longevidad del colchón. Los colchones con espuma de alta densidad duran mínimo unos nueve años. Los de baja y media densidad tienden a tener una vida más corta, en el rango de los 4-8 años.
En general, cuanto más denso es un colchón de viscoelástica, más fuerte y duradero será el olor químico incial que desprenda.
Curiosamente, una queja muy común entre los propietarios de colchones de viscoelástica es que su colchón es demasiado firme y esto ocurre principalmente en los colchones de baja densidad. Esto se puede explicar, en parte, por el hecho de que mucho colchones suelen utilizar una pequeña cantidad de viscoelástica sólo como acolchado,( por lo general 6 cm o menos), sobre una base de espuma de poliuretano firme (HR). En estas circunstancias, el acolchado con viscoelástica de baja densidad, puede producir un mayor contacto con la capa central de poliuretano, dando la sensación de ser un colchón más duro, en comparación con otro igual, pero acolchado con viscoelástica de densidad alta.
El acolchado con viscoelástica de alta densidad, por el contrario, aumenta la suavidad. Además, la capacidad de conformación es superior lo que resulta en un mínimo de puntos de presión, y esto puede dar lugar a la sensación de "dormir en una nube".
Si todo el colchón es de viscoelástica y ésta es de alta densidad, entonces si que puede parecer demasiado duro, pero sólo cuando está frío, debido a su sensibilidad a la temperatura (ojo a la hora de probar un colchón de viscoelástica en un lugar con mucho calor). La viscoelástica se vuelve más suave a medida que la temperatura ambiente aumenta o bien con el calor del cuerpo del durmiente a medida que pasan las horas.
La mayoría de los propietarios de los colchones de viscoelástica de alta densidad, se acostumbran a estos cambios térmicos. Sin embargo, algunos dicen que el colchón es demasiado firme al meterse en la cama, pero luego como la cama caliente se sienten como durmiendo en el "barro" o en "arenas movedizas". A algunos les cuesta incluso levantarse. Las personas que son físicamente más débiles, como los ancianos o los enfermos y discapacitados, pueden querer evitar colchones compuestos sólo de viscoeslástica de alta densidad.
La viscoelástica de densidad media es menos sensible a la temperatura que la de alta densidad. Como resultado, las camas de densidad media tienen menos quejas acerca de ser demasiado duras con el frío.
La viscoelástica que se infunde con perlas de gel pequeñas tiende a tener un menor número de quejas relacionadas con el calor que la viscoelástica normal.
Los que duermen boca arriba tienden a estar satisfechos con cualquier densidad, pero la viscoelástica de alta densidad pueden proporcionar mayor alivio del dolor.
Los que duermen de lado tienden a estar satisfechos con cualquier densidad, pero los colchones de viscoelástica de densidad media pueden proporcionar más comodidad.
La viscoelástica también viene en diferentes formulaciones: estándar (espuma visco tradicional, sensible a la temperatura, respuesta lenta), a base de plantas (utiliza aceites naturales, más transpirable y la respuesta es más rápida), y gel (gel de viscoelástica, comercializado como fresco).
 |
| viscoelástica de memoria lenta |
 |
| viscoelástica de memoria rápida |
A pesar de sus ventajas, la viscoelástica tradicional ha sido criticada por el uso de muchos componentes tóxicos durante el proceso de fabricación. Algunas personas también encuentran la viscoelástica demasiado calurosa, y algunas marcas pueden desprender olores fuertes al principio. Las versiones más nuevas como los colchones de viscoelástica con gel o a base de plantas tienen como objetivo llevar a cabo mejoras en estas áreas. La viscoelástica también tiene reputación de ser cara, aunque muchas marcas están a la par con camas de muelles de calidad hoy en día.
Colchones de látex
El material de espuma de látex natural proviene de árboles de Hevea brasiliensis. Los colchones de látex han existido desde la década de 1900, cuando el proceso de Dunlop hizo de la espuma de látex un producto viable. Con los años, el proceso ha sido refinado para incluir el proceso Talalay, así como el látex sintético. Inicialmente, el látex era muy caro, pero la fabricación moderna ha bajado el precio considerablemente (a veces a costa de un descenso en la calidad del producto).
Los colchones de látex suelen distinguir en dos factores: el proceso de fabricación y el tipo de látex. El proceso Dunlop es el método original para la fabricación de espuma de látex, que se traduce en un producto duradero, a menudo firme. El proceso Talalay es más refinado y se obtiene un producto más uniforme y personalizable generalmente considerado como superior. El líquido del látex de cualquiera de los tipos puede estar hecho de látex 100% natural, un látex de origen químico-sintético, o una mezcla de ambos. Los aficionados al látex prefieren el producto 100% natural por su durabilidad, respeto al medio ambiente y las propiedades hipoalergénicas.
Los colchones de látex tienen un diseño muy simple. Un colchón de látex verdadero realmente contendrá sólo látex, tanto en el núcleo de soporte como en las capas de confort. Se fabrica la espuma de látex, se cura, se corta y se crean las capas para crear un colchón. Las capas pueden ser pegadas o no entre sí.
 |
| Capa de un colchón de látex |
Los colchones de látex 100% natural son los segundos en términos de satisfacción del propietario. Este tipo de colchones son muy duraderos, con esperanzas de vida de 15 o más años. Este material también ofrece muchos de los beneficios de la viscoelástica como un soporte de baja presión y el contorno natural del cuerpo, pero sin la lenta respuesta, olores químicos, o la retención de calor de la viscoelástica.
Los colchones de látex tienden a ser un poco más caros que otros tipos de colchón, debido al coste de los materiales utilizados.
